Agriotes lineatus
Nombre común: Escarabajo alambre o gusano alambre
Nombre científico: Agriotes lineatus
Descripción de la plaga:
Agriotes lineatus es un insecto perteneciente a la familia Elateridae, conocido comúnmente como gusano alambre debido a las larvas, que tienen una forma alargada y dura. La plaga tiene las siguientes características:
Adulto: El adulto de Agriotes lineatus es un escarabajo de cuerpo alargado, que mide entre 10 y 15 mm de longitud. Su color es marrón oscuro a negro, con un tono algo metálico en las elitras. El cuerpo es estrecho y alargado, lo que le permite moverse rápidamente por el suelo. Las antenas son filiformes y de tamaño moderado.
Huevo: Los huevos de Agriotes lineatus son pequeños, de forma esférica y de color blanco, y son depositados en el suelo a una profundidad de 5 a 10 cm cerca de las raíces de las plantas afectadas.
Larva: Las larvas son el estadio más dañino de esta plaga. Son de color blanco a amarillento, con una cabeza marrón y un cuerpo rígido. Pueden llegar a medir hasta 20 mm de largo y tienen una forma curvada, parecida a un alambre, de ahí su nombre común. Se alimentan de las raíces de las plantas y se mueven de manera rápida y serpenteante.
Pupa: La pupa de Agriotes lineatus se desarrolla en el suelo, rodeada por una cápsula de tierra y restos orgánicos. Es de color blanco a amarillento y se transforma en adulto en un período de 2 a 4 semanas.
Cultivos afectados:
Agriotes lineatus es una plaga que afecta principalmente a los cultivos agrícolas, especialmente aquellos que tienen raíces suculentas. Entre los cultivos más atacados se incluyen:
Cereales: Trigo, cebada, maíz.
El daño es causado principalmente por las larvas, que se alimentan de las raíces de las plantas, lo que puede causar la muerte de la planta o el debilitamiento del cultivo.
Síntomas de ataque:
Raíces dañadas: Las larvas se alimentan de las raíces de las plantas, dejando agujeros y cortes visibles en las raíces. Esto debilita la planta, impide la absorción adecuada de agua y nutrientes, y puede causar que las plantas se marchiten o mueran.
Caída de plantas: En casos severos, la infestación de larvas puede provocar la caída de las plantas debido a la pérdida de su sistema radicular. Esto es particularmente problemático en cultivos jóvenes o en plántulas, que son más vulnerables.
Deficiencias en el crecimiento: En cultivos más establecidos, las larvas pueden ralentizar el crecimiento de la planta, causándoles un desarrollo deficiente o una floración y fructificación más pobres.
Síntomas visibles: Las plantas pueden presentar signos de estrés como amarilleo o marchitez en la parte superior, lo que es indicativo de un daño en las raíces.
Ciclo biológico:
El ciclo biológico de Agriotes lineatus es anual y se desarrolla en el suelo en varias etapas:
Huevo: Las hembras depositan sus huevos en el suelo, cerca de las raíces de las plantas, entre la primavera y el verano. Los huevos eclosionan en un período de 2 a 3 semanas, dependiendo de las condiciones climáticas.
Larva: Después de la eclosión, las larvas se alimentan de las raíces de las plantas durante su fase de crecimiento. Esta fase puede durar entre 1 y 3 años, ya que las larvas tienen un ciclo de vida largo. Durante este tiempo, pueden causar daño significativo a las plantas. Las larvas se desarrollan en el suelo y tienen una forma alargada y dura.
Pupa: Al final de la fase larval, las larvas pupan en el suelo, donde pasan por una fase de transformación que dura entre 2 y 4 semanas. La pupa está protegida por una cápsula de tierra.
Adulto: Los adultos emergen de las pupas al final de la primavera o principios del verano y viven entre 2 y 3 meses. Durante este período, los adultos se alimentan poco y se dedican a la reproducción. Son capaces de saltar gracias a sus potentes patas traseras y suelen permanecer cerca del suelo.
Estacionalidad:
Agriotes lineatus tiene un ciclo anual, y su actividad varía según las estaciones:
Primavera: Durante la primavera, los adultos emergen y comienzan a buscar lugares adecuados para depositar sus huevos. Las temperaturas cálidas favorecen la actividad reproductiva.
Verano: Las larvas empiezan a eclosionar y se desarrollan alimentándose de las raíces de las plantas. Esta fase es crítica, ya que es cuando los cultivos son más vulnerables al daño.
Otoño e Invierno: Durante el otoño, las larvas siguen alimentándose de las raíces, y muchas de ellas pupan antes de las bajas temperaturas del invierno. En climas más fríos, las larvas pueden pasar el invierno en estado larval, mientras que los adultos generalmente sobreviven poco tiempo en este periodo.
Las temperaturas cálidas y húmedas favorecen el ciclo completo, y la actividad máxima de la plaga suele coincidir con la primavera y el verano, lo que hace que esos sean los periodos más críticos para la protección de los cultivos.








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